Entre un tubo y una conexión del sistema Saladillo H3, no existe unión, existe termofusión. Esto significa que tubo y conexión se fusionan entre sí molecularmente, dando lugar a una cañería contínua, que garantiza el mas alto grado de seguridad en instalaciones de agua fría, caliente y calefacción.
Termofusión: un proceso simple, seguro e inalterable
La termofusión, a diferencia de la soldadura con aporte, es inalterable en el tiempo. Además se ve sumamente facilitada por el empleo de herramientas prácticas y precisas, que simplifican su ejecución y eliminan los problemas de obra derivados de errores humanos. Su sencillez y rapidez, se traduce en un importante ahorro de tiempo, y costo de instalación.
El proceso de termofusión es muy sencillo. Durante unos pocos segundos el tubo y la conexión son sometidos a una temperatura de 260/270 °C. Cumplido el tiempo de calentamiento, que varía según los distintos diámetros, entre 6 y 40 segundos, tubo y conexión se unen por interposición de sus extremos, fusionándose, es decir fundiéndose en una sola pieza.
Ensayo de tracción de soldadura
Este ensayo de tracción demuestra en forma práctica la seguridad de la termofusión. En la probeta ensayada, el tubo cede a la carga, deformándose. Las te, fusionadas en sus extremos junto con la unión por termofusión, permanecen inalterables. Ensayos comparativos realizados en los laboratorios de investigación del CITIP/INTI (organismo Argentino), demostraron que la resistencia a la tracción del sistema Saladillo H3 es un 50% superior a la de cualquier otro sistema termofusionable.
INSTALACIONES DE GRAN PORTE
de 2 1/2" a 5"
ROSCA Y FUSIÓN:
Todas las opciones de transición